IndyCar - PortlandÁlex Palou reescribe la historia de nuevo: tetracampeón tras el triunfo de Will Power
El piloto de Ganassi aseguró su cuarto título con un tercer puesto en Portland, después de que un problema eléctrico dejara a Pato O'Ward con nueve vueltas perdidas, y aumenta aún más su leyenda. Power resistió a Christian Lundgaard para darle a Penske su primer triunfo de 2025.

Hace ya unas cuantas semanas, si no unos cuantos meses, que lo acontecido este 10 de agosto era cuestión de tiempo. Las pocas dudas existentes se habían ido solventando con victorias, una consistencia insólita y los comprensibles altibajos ajenos. Faltaba pedir la cuenta, y a la primera buena oportunidad ha sucedido. Álex Palou Montalbo, a sus 28 años, ya puede proclamar a los cuatro vientos que es tetracampeón de IndyCar, un hito del que solo otros cinco hombres han podido presumir en los más de 100 años de historia de la competición americana, y que cimenta su estatus como uno de los mejores pilotos del mundo.
La consecución del título ha llegado, dos carreras antes del final de la temporada, en el Gran Premio de Portland, donde casi ha sido una anécdota que su quinta posición de salida terminase "solo" en un tercer lugar, si bien el español peleó con ahinco hasta las vueltas finales una victoria que terminó en manos del veterano Will Power y del Team Penske, ambos muy necesitados de ella. Al principio, el foco estaba situado en la figura del único piloto que se interponía en el camino de Palou y su cuarto título, Pato O'Ward, que arrancaba desde la pole y que necesitaba que le ocurriera algún suceso extraño al barcelonés para prorrogar dos semanas más sus escasas opciones. En su lugar, el mexicano fue la víctima del suceso extraño.
Después de las primeras paradas, cuando aún sólo habían transcurrido 21 caóticas vueltas, el coche de O'Ward empezó a perder potencia en la recta opuesta hasta apagarse el motor por completo. El culpable: un cortocircuito en la caja de inyección directa del vehículo, causado por un cable que empezó a vibrar hasta freír el sistema por completo. El piloto de McLaren logró llegar hasta sus pits y eventualmente reemprendió la marcha, pero perdió nueve vueltas en el proceso y toda opción de forzar la mano de Palou, ya que necesitaba como mínimo acabar en undécima posición.
Con anterioridad, la carrera había comenzado de forma agitada, aunque los accidentes no se produjeron en la temida salida, donde O'Ward había repelido los avances de Felix Rosenqvist y de Power a la par que Palou superaba a David Malukas, pasando a ser el mejor situado de partida con el neumático duro. Al término de la segunda vuelta, Santino Ferrucci perdió el control e impactó fuertemente contra el muro de pits, sin mayores consecuencias, causando un caution que fue seguido casi inmediatamente por otro debido a los restos de un toque de Kyffin Simpson con Louis Foster y Rinus VeeKay.
Un tercer caution llegó en la vuelta 15, tras una serie de toques entre Christian Rasmussen y Conor Daly durante dos vueltas que terminó en un aparatoso accidente del segundo, muy cabreado con la agresividad de su ex-compañero danés. Este último caution sucedió al inicio de la primera ventana de parada para los líderes, lo cual aprovecharon O'Ward, antes de su avería, y un Rosenqvist que heredaría el liderato virtual, pero no Power y Palou, que eligieron seguir en pista al igual que otros 10 pilotos. Varios de ellos habían parado en cautions anteriores, entre ellos Graham Rahal y Callum Ilott, que serían los grandes beneficiados de esa elección estratégica.
Con un juego de blandos nuevos de salida, Power abrió un gran margen de hasta 10 segundos con Palou antes de su primera detención y, crucialmente, de casi medio minuto con un Rosenqvist lastrado por el tráfico de los que aún no habían parado. De este modo, pese a una parada lenta en la vuelta 35, Power emergió por delante del sueco, quien sería superado en el mismo giro por un fulgurante Christian Lundgaard, el hombre de la 'pole que no fue' el sábado, y que había avanzado de la séptima a la quinta plaza durante los primeros compases. Ahora pasaba a ser segundo en el orden real, toda vez que la estrategia de Power le salía rana a Palou al reincorporarse a pista en 12ª posición.
Repitió juego de blandos Power, que debía montar los duros más adelante, y procedió de nuevo a abrir un gran margen de al menos 15 segundos con toda la parrilla, a excepción de un Lundgaard que le seguía a cuatro. Palou ganó rápidamente puestos hasta situarse séptimo detrás de Kyle Kirkwood antes de las paradas de los pilotos a estrategia cambiada, teniendo entonces un déficit de 20 segundos con Power. Poco después de su parada, al tener que montar el duro, Rosenqvist perdió posiciones con un pletórico Alexander Rossi y con Scott Dixon, que marcaban la nueva referencia del podio. No obstante, el buen ritmo del segundo stint de Palou le permitió salir por delante de todos ellos, escalando en la práctica a los puestos de podio.
Power y Lundgaard se seguían a escasa distancia, pero ambos con condicionantes: el australiano, con su juego de duras y sin más blandos nuevos que usar, y el danés con una situación precaria de gasolina por su temprana primera parada. Todo esto, sumado a la poca cooperación del tráfico con Power, en especial Marcus Ericsson y Simpson, permitió que la gran desventaja de Palou quedara paulatinamente en nada, enganchándose al duo de cabeza durante unas últimas 20 vueltas plagadas de tensión. Jugándose ambos su primera victoria del año, Lundgaard no pudo aprovechar del todo sus blandos nuevos por el ahorro de gasolina, y Palou trató de encontrar la forma de superar al piloto de McLaren.
La primera tentativa no salió por poco; la segunda, a cuatro vueltas del final, acabó con su coche atravesando la escapatoria de la curva 6 tras una expeditiva defensa de Lundgaard, poniendo el fin a ambas pugnas. De este modo, Power se reencontraba con un triunfo que había catado por última vez en este mismo trazado de Portland hace un año, evitando a su vez que la peor temporada de Penske en 26 años concluya sin victorias, y con una sensación generalizada de despedida agridulce por el limbo laboral en el que se encuentra, sin oferta de renovación para 2026. A la hora de la verdad, sus 44 años parecen pesar más que sus 45 victorias...
Lundgaard volvió a quedarse a las puertas como en Laguna Seca, con su tercer segundo lugar de 2025 y su sexto podio del año. Para Palou, el undécimo, su "peor" resultado en circuito permanente desde junio de 2024, pero el objetivo primordial había quedado completamente plasmado. La celebración con su equipo fue acorde al logro, pero por cuestiones contractuales todavía no incluye una Astor Cup con la que tampoco posará en Milwaukee dentro de dos semanas, teniendo que esperar hasta la cita final del 31 de agosto en Nashville. Detrás de los hombres del podio, terminaron Rahal y Rossi, ambos con su mejor resultado del año en una temporada difícil para ambos, lejos de los objetivos por los que solían pelear en un pasado no tan lejano.
Rahal, que arrancaba en 22ª posición, aprovechó a la perfección sus tres stints de blandas nuevas y consiguió suficiente margen para salir delante de Rossi. Por detrás de ellos, Josef Newgarden le había ganado la partida en la última parada a Dixon, pero el neozelandés cometió un raro error de cálculo al no predecir la lenta salida de la chicane de su rival con gomas frías y se lo llevó puesto, costándole una vuelta en el enésimo contratiempo no forzado que sufre este año el bicampeón americano, 18º en la clasificación general. El consiguiente 'drive through' relegó a Dixon al undécimo lugar y promocionó a la sexta plaza a Ilott, que obtuvo otro gran resultado por tercera carrera consecutiva merced a la estrategia.
Scott McLaughlin, muy activo al inicio de carrera, se sobrepuso a un malísimo segundo stint para acabar séptimo delante de Marcus Armstrong, quien superó en pista a su compañero Rosenqvist. Por su parte, Malukas se vio condenado otra vez por el mal ritmo con blandos usados y una parada demasiado temprana a mitad de carrera, que le obligó a un 'splash final' y a caer de un top 10 que cerró Colton Herta. No fue un timing muy apropiado para el joven Malukas, postulado por muchos como el potencial reemplazo de Power por su vinculación velada con Penske, y que lucía este fin de semana los colores de uno de los patrocinios que llevó McLaughlin hace pocas carreras.
RESULTADOS FINALES DEL GP DE PORTLAND 2025
La historia empieza a ser muy selecta a la hora de postular comparaciones para Álex Palou. Por primera vez desde Cristiano da Matta en la temporada 2002 de CART, un piloto de IndyCar logra un título con dos carreras o más de antelación, en un año dominado de principio a fin, aderezado con su primer triunfo en las 500 millas de Indianápolis y cimentado con una cuarta corona que le permite igualar a tres nombres míticos de la historia del certamen: Mario Andretti, Dario Franchitti y Sébastien Bourdais. Por delante, tan solo los seis títulos de Scott Dixon y los siete de A. J. Foyt. Que nadie le diga que es imposible, porque a estas alturas ya no lo es.
Fotos: IndyCar Media