Audi SQ5

El Audi Q5 no siempre ha contado con una versión deportiva de altas prestaciones. Fue necesario esperar al lavado de cara de la primera generación del exitoso y popular SUV mediano de Audi para ser testigos de la puesta de largo de una variante que coronase la oferta en términos de exclusividad y de rendimiento. El Audi SQ5. Un modelo que llegó al mercado en el verano del año 2012.

Es el primer deportivo S con motor diésel de la historia de Audi. La entrada en escena del SQ5 marcó el inicio de una nueva para esta saga de automóviles deportivos. El primero de una larga lista de deportivos diésel que han ido viendo la luz en años posteriores. Sin embargo, no hubo que esperar mucho tiempo para que la oferta mecánica del SQ5 fuera ampliada. A comienzos del año 2023 se presentó en sociedad el SQ5 con motor de gasolina.

A pesar de que el apartado mecánico del SQ5 ha sufrido importantes cambios con el paso del tiempo, y sobre todo de las distintas actualizaciones del modelo, este modelo siempre se ha mantenido en cartera en la gama Q5.

En septiembre de 2016 fue desvelada la segunda generación del Q5. Un modelo que, nuevamente, fue usado para el desarrollo de una versión deportiva SQ5. Fue en el Salón del Automóvil de Detroit 2017 cuando se produjo el debut del SQ5 de segunda generación. Un modelo renovado por completo que trajo consigo numerosas novedades en materia de diseño exterior, de equipamiento tecnológico y de mecánica.

A finales del convulso año 2020 el SQ5 de segunda generación fue sometido a un lavado de cara. Un «facelift» a modo de actualización de mitad de ciclo que permitirá a esta generación, la que podemos encontrar actualmente en los concesionarios, afrontar el resto de vida comercial que le queda por delante. Esta actualización será recordada en la historia del SQ5 por ser el momento en el que se produjo la electrificación de este modelo. Sí, como veremos más adelante, el SQ5 está equipado con un motor electrificado.

En el mes de septiembre de 2024 tuvo lugar la presentación en sociedad de la tercera generación del Audi Q5. Un cambio generacional que también afectó, lógicamente, al SQ5. La variante deportiva del popular SUV de Audi fue objeto de una renovación integral. Estrenó diseño exterior, equipamiento tecnológico, mecánica e incluso plataforma. El nuevo Q5, variante SQ5 incluida, es el primer SUV de Audi en hacer uso de la plataforma PPC (Plataforma Premium Combustión).

Es un modelo rápidamente identificable puesto que luce toda una serie de rasgos característicos. El nuevo SQ5 se diferencia de manera clara de un Q5 estándar. Está ataviado con un kit de carrocería diseñado especialmente para la ocasión, se calza unas llantas exclusivas y, sobre todo, presenta un llamativo sistema de escape deportivo con cuatro salidas perfectamente integradas en el difusor.

Tiene un tamaño mediano. El SQ5 mide 4,72 metros de largo. Una longitud que le sitúa en el segmento D-SUV. En su interior hay cinco plazas. La distancia entre ejes alcanza los 2,82 metros. El maletero cubica un volumen de carga de 510 litros. Una cifra que se puede incrementar hasta los 1.510 litros abatiendo los respaldos de los asientos posteriores.

Está encuadrado en una categoría donde la competencia es voraz. Entre los principales rivales del Audi SQ5 se encuentran las versiones deportivas de modelos tan relevantes como el Mercedes GLC, el BMW X3, el Lexus NX, el Alfa Romeo Stelvio, el Mazda CX-60 y el Volvo XC60.

La gama de motores del Audi SQ5 ha sufrido importantes cambios con el paso de los años y, sobre todo, de las distintas generaciones. La entrada en escena de la tercera generación supuso el regreso del SQ5 con motor de gasolina.

Si echamos un vistazo bajo el capó del nuevo SQ5 nos encontraremos con un motor de gasolina V6 de 3.0 litros TFSI. Un bloque electrificado con tecnología híbrida ligera (MHEV) de 48 voltios que desarrolla una potencia de 367 CV y 550 Nm de par máximo. Se maneja a través de una caja de cambios automática S tronic de doble embrague con siete velocidades y un sistema de tracción integral quattro.

Puede acelerar de 0 a 100 km/h en 4,5 segundos. Al disponer de tecnología MHEV es considerado un coche híbrido y, por lo tanto, luce el distintivo ambiental ECO de la DGT con las ventajas de movilidad que ello supone.

El Audi SQ5 se fabrica en México. En concreto, el proceso de producción en serie se lleva a cabo en unas instalaciones del Grupo Volkswagen localizadas en San José Chiapa.