GP CanadáCuatro motores Renault en la Q3 del rápido circuito de Montreal

Tras el Gran Premio de Mónaco, Honda pudo permitirse el lujo de sacar pecho por haber metido a sus cuatro monoplazas entre los diez primeros de la parrilla del sinuoso trazado urbano, pero dos semanas más tarde es su máximo rival en la Fórmula 1 quien hace lo propio.

Renault comenzó la temporada con un propulsor prometedor, pero que seguía sufriendo de muchos problemas mecánicos, lo que obligó a la firma francesa a reducir la potencia hasta que el diseño de las bielas -principal inconveniente- fuera rectificado. Dicha modificación llegó a tiempo para el Gran Premio de España y, tras un fin de semana de evaluación, sus ingenieros dieron el visto bueno para comenzar a utilizar el propulsor a máxima potencia en Mónaco.

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Ello incluía un nuevo modo de clasificación que ya dio sus frutos en el Principado, en el que Daniel Ricciardo se colocó séptimo en parrilla, con Carlos Sainz noveno. Sin embargo, el mejor resultado ha llegado en un circuito de potencia en el que tradicionalmente los equipos motorizados por Honda y Renault sufrían para mantener el ritmo de sus rivales propulsados por Mercedes y Ferrari.

En el circuito Gilles Villeneuve de Montreal, Daniel Ricciardo ha vuelto a comandar el grupo de los Renault con una excelente cuarta posición en parrilla, aprovechando al máximo la mala actuación de Valtteri Bottas y el infortunio de Max Verstappen. Junto a él, Nico Hülkenberg, Lando Norris y Carlos Sainz también han tomado parte en una Q3 en la que han participado tres motores Ferrari (aunque Kevin Magnussen no salió a pista tras su accidente del final de la Q2), dos Mercedes y un Honda.

Competitivos en velocidad punta

La mejora de potencia estimada por Renault tras la modificación introducida en Barcelona es de unos 40 caballos, lo que parece acercar a la marca gala a los registros de Mercedes y Ferrari, manteniéndose además por delante de Honda.

Si analizamos los datos de medición de velocidad punta, vemos que en la clasificación el más rápido fue el poleman, Sebastian Vettel. El alemán registró una velocidad máxima de 333,3 km/h en la recta previa a la chicane de entrada a meta, con dos pilotos más por encima de los 330: Sergio Pérez (330,9 km/h) y Daniel Ricciardo (330,7 km/h).

Los otros tres monoplazas motorizados por la marca francesa quedaron séptimo (Sainz - 328,9 km/h), noveno (Hülkenberg - 328,5 km/h) y undécimo (Norris - 327,8 km/h). Por su parte, el mejor piloto de Honda fue Alexander Albon, que registró 328,4 km/h, con Daniil Kvyat y Pierre Gasly cerrando este particular ranking con 325,9 y 324,4 km/h respectivamente.

En la medición de la línea de meta, a la que se llega en aceleración tras la chicane que da paso al célebre Muro de los Campeones, los cuatro coches con motor Renault quedaron emplazados entre los ocho primeros (entre 303,4 y 301 km/h), con Max Verstappen como mejor piloto Honda en la décima posición y con una velocidad en ese punto de 300,4 km/h. En cualquier caso, esta segunda medición depende de la velocidad de paso por la chicane tanto como de la capacidad de aceleración del monoplaza en sí.

Fotos: Renault Sport F1 | McLarenF1