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Así es la Europa con coches eléctricos, pero sin cargadores con los que alimentarlos

El último informe de ACEA vuelve a poner de manifiesto que el coche eléctrico se enfrenta a un problema que va a ralentizar irremediablemente su penetración en el mercado europeo: el lento crecimiento de instalación de puntos de recarga en su territorio.

Así es la Europa con coches eléctricos, pero sin cargadores con los que alimentarlos
Los puntos de recarga no siguen el ritmo del coche eléctrico, ¿problema a la vista?

8 min. lectura

Publicado: 20/07/2022 11:30

No es novedad, pues no son pocas las asociaciones y empresas relacionadas con el coche eléctrico que llevan años denunciando que las exigencias de la Unión Europea en relación a este tipo de vehículos no está siendo acompañada de una infraestructura adecuada.

Y es que, como sabes, en abril de 2019 el Parlamento Europeo y el Consejo adoptaron el Reglamento (UE) 2019/631 por el que se introducen normas de emisiones de dióxido de carbono (CO₂) para turismos nuevos y vehículos comerciales ligeros (furgonetas) en la Unión Europea.

Este reglamento estableció objetivos de reducción de -15% y -37,5% para las emisiones de CO₂ del tubo de escape de los automóviles de nueva matriculación para los años 2025 y 2030 respectivamente. El objetivo fijado para 2030 para las furgonetas era del -31 %.

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El año pasado, como parte de su paquete climático «Fit for 55», la Comisión Europea propuso una revisión del Reglamento, manteniendo el objetivo del -15 % para 2025, reforzando el objetivo de 2030 hasta el -55 %, e introduciendo un nuevo objetivo de -100 % para 2035. En junio de 2022, tanto el Parlamento Europeo como los estados miembros de la UE aprobaron los objetivos de CO₂ propuestos por la Comisión Europea.

La infraestructura de carga en Europa

La cuestión es que todas estas exigencias impuestas a los fabricantes deben ir acompañadas de una infraestructura que la acompañe. De lo contrario, Europa estará obligando a la industria de la automoción a desarrollar una tecnología que, en la práctica, no podrá sustituir a los vehículos convencionales de combustión.

La realidad es que la infraestructura europea no está acompañando al volumen de ventas de coches eléctricos, lo que genera una desigualdad que, entre otras cosas, provoca desconfianza en el consumidor y amenaza con detener el auge del coche eléctrico.

Los puntos de carga crecen a un ritmo insuficiente en Europa.

Así lo refleja el último informe de estado de ACEA, la asociación que aglutina a los fabricantes más relevantes de la industria de la automoción. Y que saca las siguientes conclusiones clave:

Los 10 puntos clave que definen la infraestructura de carga en Europa

  1. En los últimos cinco años, las ventas de coches eléctricos han crecido más de tres veces más rápido que la construcción de puntos de recarga.
  2. Las ventas de automóviles eléctricos aumentaron más de 10 veces entre 2017 y 2021, mientras que el número de los cargadores públicos en la UE se triplicaron durante el mismo período.
  3. Aunque ha habido un fuerte crecimiento en el despliegue de infraestructura para vehículos eléctricos enchufables (ECV) desde 2017 (+180%), el número total de puntos de recarga disponibles en toda la UE (307.000) está muy por debajo de lo que se requiere.
  4. De hecho, se necesitarían hasta 6,8 millones de puntos de recarga públicos en toda la UE para 2030 para alcanzar la propuesta de reducción de CO₂ del 55% para turismos (lo que significa que debería haber un crecimiento de más de 22 veces en menos de 10 años).
  5. Casi el 50% de todos los puntos de recarga para coches eléctricos se concentran en dos países de la UE: Países Bajos (90.000 cargadores) y Alemania (60.000). Estos países representan menos del 10% de toda la superficie de la UE.
  6. La otra mitad de cargadores se encuentran dispersos en el 90% restante de la superficie de la región.
  7. Países Bajos, el país con más infraestructura, tiene casi 1600 veces más puntos de recarga que el país con menos infraestructura (Chipre, con 57 puntos de recarga).
  8. 11 países ni siquiera tienen dos puntos de recarga por cada 100 km. de carretera; seis no tienen un punto de recarga por cada 100 km. de carretera.
  9. Los países con menos de un punto de recarga por cada 100 km. tienen una cuota de mercado de ECV inferior al 4 % (excepto Grecia).
  10. De los 307.000 puntos de recarga disponibles actualmente en la UE, menos de 42.000 (14%) son aptos para la carga rápida (con una capacidad de 22kW), mientras que los puntos «normales» (≤ 22kW) representan la gran mayoría (más de 265.000). Los llamados puntos de carga «normales» también incluyen muchos puntos de energía de baja capacidad comunes o enchufes de jardín que no son adecuados para cargar vehículos a una velocidad aceptable.

La infraestructura de carga en España

El informe de ACEA refleja la situación de la infraestructura de carga en la Unión Europea, pero también la de los países que conforman la misma.

Y España no sale bien parada, pues pasa por ser el país con mayor desigualdad entre el volumen de territorio que posee y el número de puntos de recarga instalados en el mismo. En concreto, nuestro país constituye un 12,5% del área total de la UE, pero únicamente cuenta con un 3,4% del total de cargadores (10.480 unidades).

Dicha desigualdad sólo es comparable a la de países como Rumanía o Polonia. En cambio, un país con un área ligeramente mayor como Francia (13,7%), cuenta con el 12,1% de cargadores de la UE en su territorio.

España no cuenta con un número de cargadores acorde a la extensión de su territorio.

En la estadística de distribución de puntos de carga la situación es incluso peor, ya que España dispone de 1,6 puntos por cada 100 km. de carretera. Es decir, peor media que 16 de los 27 países europeos objeto del estudio.

Finalizando con el tipo de puntos de recarga que podemos encontrar, el informe de ACEA señala que del total de 307.000 puntos disponibles en la UE, 41.707 son de carga rápida, estando 3813 de ellos instalados en España. El resto (5279) ofrecen una velocidad de carga inferior a 22 kW.

Esto deja en muy mal lugar a la infraestructura de carga de altas prestaciones del continente, aunque lo cierto es que sólo tres países; Alemania (11.241), Suecia (4019) y Países Bajos (3934) cuentan con más puntos de carga rápidos que nuestro país.

Está claro, la Unión Europea y España tienen mucho camino por recorrer si quieren que el objetivo de eliminar los vehículos con motor de combustión sea una realidad en 2035.

Fuente: ACEAFotos: Unsplash | ACEA

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