El Great Wall Futurist es el sedán retro más atractivo que hemos visto ultimamente
Una de las sorpresas del reciente Salón del Automóvil de Pekín 2020 ha sido el Great Wall Futurist, un atractivo sedán compacto de marcado estilo retro que cuenta con un moderno esquema mecánico eléctrico. Por el momento es tan solo un ejercicio de estilo cuyo paso a producción no ha sido confirmado.
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Publicado: 29/09/2020 08:00
Estos días ha tenido lugar el evento Auto China 2020, nombre comercial con el que se conoce a la reciente edición 2020 del crisis sanitaria que está afectando a todo el globo, ha contado con numerosas novedades, como los nuevos BMW M3/M4 y el Lynk & Co Zero concept, además del estreno de algunas sorpresas, como ha sido el caso del Honda SUV e: concept o el Great Wall Futurist.
Este último es toda una novedad para la compañía china, pues se trata de una propuesta de diseño muy atractiva, radicalmente alejada de los productos habituales de las marcas de esta corporación. Por concepto nos recuerda los numerosos prototipos de estilo retro que las firmas japonesas suelen presentar en sus salones locales. Vehículos con formas y proporciones claramente clásicas pero con rasgos modernos y convenientemente estilizados.
El Great Wall Futurist es un sedán de tamaño compacto de carácter conceptual, o sea, nos encontramos ante un prototipo de salón, un ejercicio de estilo cuyo único fin parece ser el de llamar la atención en el stand de la corporación china en el Salón de Pekín. Ya que por el momento la compañía no ha confirmado que tenga intención alguna de trasladar este modelo a la cadena de montaje de ninguno de los distintos sellos que comercializa en ese mercado, como Great Wall, Haval, Ora o Wey.
Aunque la compañía no ha revelado las especificaciones del prototipo, sí que ha confirmado que el modelo cuenta con un moderno esquema eléctrico puro, de ahí el apelativo Futurist. Aunque desconocemos su procedencia y sus cifras de rendimiento, la compañía ha confirmado que está basado en la nueva plataforma Lemon, capaz de soportar versiones de combustión tradicional, híbridas, eléctricas puras e incluso con pila de combustible de hidrógeno. Aunque la compañía no ha dado siquiera indicios de que este atractivo sedán pueda ser trasladado a producción.
Su configuración estética es lo más destacado de este modelo, pues parece un sedán compacto de la década de los setenta pero con rasgos muy modernos, sobre todo en el interior, donde encontramos como se combinan a la perfección materiales clásicos como el metal cromado o la piel con las distintas pantallas. El responsable de este diseño es Phil Simmons, antiguo diseñador de Land Rover.