Porsche está en apuros, la marca que todos envidiaban ahora pide auxilio desde dentro
Porsche está en crisis, y esta vez es oficial, aunque a Oliver Blume no le guste decirlo. Pero el anuncio de nuevos planes de ahorro son un claro indicador de que la marca alemana no está en el camino de los beneficios. Las gallinas de los huevos de oro no han muerto todavía, pero sí que están agonizando por un cuidador que no ha sabido hace su trabajo.

¿Recuerdas cómo se gestó el motín contra Herbert Diess? Fue desde dentro y por algunos de sus más estrechos colaboradores, que se juntaron para destituir al gran jefe del grupo Volkswagen. Entre ellos, se encontraba Oliver Blume, el jefe de una Porsche que fue boyante y que hoy va hilando una crisis con otra, en una espiral de la que no pueden salir.
Si ya hace unos meses que Blume transmitió a los empleados su decisión de implementar medidas de reducción de costes, el que todavía es el director ejecutivo de la marca, puesto al que no quiere renunciar de ninguna de las maneras, porque si lo echan del trono de Wolfsburgo seguirá el mismo camino de su antecesor en el puesto, ha vuelto a dirigirse a la plantilla del fabricante de deportivos para explicarles en una misiva que «La situación sigue siendo grave y que urge a Porsche a tomar medidas».

Porsche no está en la ruina pero poco le falta a este ritmo
Las cuentas del segundo semestre del año han revelado que las medidas de ahorro implementadas hasta ahora de poco han servido, dejando claro que «Porsche debe responder con flexibilidad y rapidez a los cambios». Dicho de otra forma, invita a los representantes de la empresa y los trabajadores a negociar un segundo paquete estructural para asegurar el rendimiento a largo plazo de la empresa.
Por ahora, Blume no ha hablado de recortes en el personal pero, a principios de año, Blume ya dejó caer su intención de reducir 1.900 puestos de trabajo en la planta de Stuttgart para 2029, a través de jubilaciones, ya que el convenio blinda todos los puestos de trabajo hasta 2030. La solución es, pues, recurrir a los despidos voluntarios y a sus correspondientes indemnizaciones.
El máximo responsable de Porsche, al que una parte de los accionistas no quiere, está convencido de que «nuestras condiciones marco se han deteriorado drásticamente en poco tiempo. Además, la electromovilidad se está desarrollando mucho más lentamente en muchos mercados de lo que el fabricante de automóviles y muchos expertos preveían hace años. Todo esto nos está afectando duramente. Más que a muchos otros fabricantes de automóviles. Nos enfrentamos a una crisis de las condiciones marco».
El modelo de negocio de Porsche durante décadas ya no funciona
Ventas globales de Porsche en el primer semestre de 2025
Modelo | Ventas | Tendencia |
---|---|---|
Macan | 45.137 | 15 % |
Cayenne | 41.837 | - 23 % |
911 | 25.608 | - 9 % |
Panamera | 14.795 | 13 % |
718 | 10.496 | -12 % |
Taycan | 8.302 | - 6% |
Uno de cada tres Porsche vendidos en todo el mundo es eléctrico o PHEV, y el Taycan está claro que no se vende.
Porsche vendió casi 146.391 vehículos en la primera mitad del año, lo que significa una disminución del 6 % en comparación con el mismo período de 2024, siendo el Macan el más vendido, aunque en esa cifra también hay parte del modelo de gasolina vendido en Estados Unidos.
La realidad es que esta caída de los beneficios viene dándose desde 2024, haciéndose más patente en el primer trimestre de 2025. Hace tan solo unos meses que el beneficio operativo ascendía a 760 millones de euros, un 40 % menos que el año anterior. Los ingresos, de poco menos de 8.900 millones de euros, también fueron inferiores a la cifra del año anterior.
Porsche se ha visto obligada a recortar sus previsiones para 2025, incluso teniendo previstos unos costes adicionales de hasta 1.300 millones de euros este año para este fin. Y eso como poco, si es que no aumentan más la provisión de gastos extraordinarios y no logran que las ventas remonten en los próximos meses.
