Los descapotables en Audi ya son una tradición que sigue desde hace más de dos décadas. Con la segunda generación del A5 todas las versiones fueron actualizadas y por tanto la versión descapotable también.
Manteniendo la esencia de la versión coupé, ahora el descapotable cuenta con un techo de lona que como todos sabemos tiene sus ventajas y sus desventajas.
En el caso de las ventajas, al no ser un techo rigido, es una capota que se puede plegar más y dejar más espacio en el maletero. Al no ser de un material excesivamente pesado, el coche no tiene un aumento considerable de peso, algo que sí ocurriría con una versión con el techo realizado en aluminio.
Las desventajas las encontramos en el mantenimiento que es mayor ya que el material es más sensible a ciertas condiciones y por tanto hay que andar con algo de cuidado con el paso de los años y el añadido de que la insonorización es algo peor.
En términos de mecánica y equipamiento, el coche es literalmente idéntico a su primo coupé conservando todos los elementos de ayuda a la conducción y conectividad.