¿Es la autonomía de un coche eléctrico lo más importante? Estos datos nos vuelven a demostrar que no
Los fabricantes de automóviles trabajan intensamente para ofrecer cada vez mayor autonomía en sus coches eléctricos. Sin embargo, la realidad nos demuestra que, en la mayoría de los casos, el alcance no tiene importancia alguna.
Son muchos los fabricantes de baterías y automóviles eléctricos los que prometen autonomías de 1.000 kilómetros en un futuro. Y, en los últimos años, el alcance que este tipo de vehículo puede llegar a cubrir con una única carga ha crecido ostensiblemente hasta situarse por encima de los 500 kilómetros en muchos casos.
Sin embargo, la realidad de muchos conductores es bien distinta, pues las rutinas habituales de muchos de nosotros no hace necesario cubrir más de 100 kilómetros diarios.
Más autonomía, más problemas
La necesidad de autonomías cada vez mayores ha transformado los coches eléctricos en los últimos años, colocando ciertas barreras que están ralentizando su penetración en el parque móvil mundial.
Si bien la tecnología asociada a las baterías sigue evolucionando, lo cierto es que las exigencias de las políticas gubernamentales y, por tanto, del mercado, han propiciado que este vaya mucho más rápido de lo que la ciencia puede asumir.
A consecuencia de esto, aumentar la autonomía de los coches eléctricos supone baterías más grandes. Y esto, a su vez, supone más peso y, como no, más coste. El resultado son coches eléctricos más grandes, pesados y caros, algo que una gran parte de la población mundial no puede asumir.
Lo que dicen los datos
Pero, ¿realmente necesitamos coches eléctricos capaces de cubrir 700 o 1.000 kilómetros? Los datos afirman que no. El estudio más reciente que así lo certifica es el que la consultora Recurrent ha elaborado a partir de los datos aportados por 18.000 conductores en Estados Unidos, un país en el que las distancias son mucho más amplias que en países como España.
En él, Recurrent afirma que los conductores de coches eléctricos estadounidenses cubren una distancia media de entre 30 y 70 kilómetros diarios. Esto, teniendo en cuenta que la autonomía media de los coches eléctricos actuales, según ciclo EPA, es de 400 kilómetros, supone entre un 8 y un 16 % de la misma.
Podríamos pensar que este dato se debe a que los usuarios de coches eléctricos realizan recorridos más cortos de forma deliberada al sentirse limitados por sus vehículos. Lo que conocemos como Range Anxiety. Sin embargo, Recurrent también desvela que la media diaria de los conductores de coches a gasolina es de 60 kilómetros.
¿Llegar más lejos o cargar más rápido?
La mejora de la velocidad de carga es sin duda un aspecto crucial en el desarrollo de la infraestructura para vehículos eléctricos, incluso más relevante que incrementar la autonomía.
Reducir los tiempos de espera en las estaciones de carga puede hacer que los vehículos eléctricos sean más convenientes y atractivos para los usuarios, ya que aborda uno de los principales obstáculos percibidos en comparación con los vehículos de combustión interna: el tiempo de recarga.
Al centrarse en mejorar la velocidad de carga, se podría aumentar la comodidad y la practicidad de los vehículos eléctricos, especialmente para aquellos conductores que necesitan recorrer distancias más largas en un solo día. Esto también podría facilitar la adopción de vehículos eléctricos en áreas donde actualmente la infraestructura de carga es limitada.
Si bien el avance tecnológico en términos de autonomía de los coches eléctricos es impresionante y ofrece nuevas posibilidades, es importante considerar las necesidades reales de los usuarios en el diseño y desarrollo de estos vehículos.
En lugar de centrarse únicamente en alcanzar autonomías extremadamente altas, los fabricantes deberían priorizar la optimización del equilibrio entre autonomía, tamaño, peso y coste, para satisfacer las demandas de la mayoría de los conductores sin generar vehículos demasiado grandes y pesados que, además, no están al alcance de la mayoría.
Igualmente, es esencial educar al público sobre las verdaderas necesidades de autonomía y desterrar la ansiedad que esta genera, mostrando que la mayoría de las personas no recorren distancias tan largas en su día a día. ¿Ayudaría esto a una mayor aceptación y adopción de los vehículos eléctricos? Probablemente.
Fuente: Forococheselectricos.comFotos: Freepik