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Lecciones desde dentro. Un ex empleado de Ford en China analiza los obstáculos a los que se enfrentan las marcas occidentales

Ford y Volkswagen son dos grandes marcas que no han tenido tanta suerte en China como en Europa o en Estados Unidos. El nuevo jefe de BYD en nuestro continente es un ex de la marca del óvalo azul, y el que ha explicado por qué estas dos marcas no triunfan en el mercado asiático.

Lecciones desde dentro. Un ex empleado de Ford en China analiza los obstáculos a los que se enfrentan las marcas occidentales
Ford perdió mucho tiempo y oportunidades en China por malas decisiones. - Reuters

4 min. lectura

Publicado: 02/04/2024 07:00

Las marcas europeas se adentraron en el gigante asiático con un par de grandes objetivos. Por un lado, hacerse un hueco en este importante mercado mundial y, por otro, tejer relaciones con fabricantes locales para aprovecharse de sus tecnologías, al mismo tiempo que producir sus modelos con un menor coste. La jugada no les ha salido a todas por igual, pero los chinos sí han aprendido a hacer mejores coches de los que hacían hace dos décadas.

Volkswagen es una de las grandes marcas que quiere estar presente en los principales mercados. Los alemanes podrían vender sus modelos por sí mismos, pero es una odisea tan difícil de conseguir que obligaría a contar con instalaciones y someterse a los estrictos requisitos que el Gobierno chino exige. Ya lo son en las circunstancias actuales, más aún si una marca decide establecerse por su cuenta, amén del elevado coste que supone la exportación de coches hasta China.

Ford Evos
El Ford Evos es un modelo específicamente desarrollado para China.

Ford no ha tenido suerte en China, un ex de la marca y ahora en BYD lo explica

De ahí que, para todas las marcas europeas, sea más provechosa la asociación con fabricantes chinos. Los alemanes mantienen alianzas con FAW y SAIC, y aunque sus productos son muy similares, por no decir idénticos, son rivales entre sí. En el caso de Ford, cuenta con alianzas con Jiangling, Zotye y Chang'an. Con la primera, vende coches eléctricos pequeños bajo el paraguas de esta marca local, con la segunda, fabrica y vende furgonetas y SUV y con la tercera tiene una empresa al cincuenta por ciento, considerando la factoría como propia y una de las de mayor producción tras la de Detroit.

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El hombre fuerte de BYD en Europa para averiguar lo que mueve a los clientes para comprar coches de marcas arraigadas es un ex de Ford en China, y ha despejado algunas de las claves acerca del ocaso de la marca americana en su país natal. Sun Yi cree que China nunca fue una prioridad para Ford, que su foco estaba puesto más que en el mercado interno de Estados Unidos. Una las pruebas que no se pueden rebatir es que Ford no tenía capacidad capacidad para desarrollar coches completos en China y se dedicaban a modificar los modelos americanos, una estrategia que no funcionó.

Desarrollar muchos modelos es clave en China y en el resto del mundo

Yi ha reconocido que trabaja mucho más en BYD de lo que hacía en Ford. En el terreno de los coches eléctricos, la tecnología es más avanzada en Asia, y la lucha es verdaderamente encarnizada, por lo que si una marca quiere sobrevivir tiene que trabajar duro, tener una estrategia adecuada y un equipo de ingeniería a la altura. Esto significa más especialización, disponer de una plantilla que haya desarrollado toda su carrera con coches eléctricos y formado parte de numerosos proyectos. Esto es por lo que BYD apuesta, y que no tienen ni Volkswagen ni Ford.

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