Fórmula 2Adiós al GP2/11: asi les fue a sus siete campeones, durante y después

El pasado sábado, la Fórmula 2 vio su última bandera a cuadros de la temporada en Abu Dhabi. El final de la tercera jornada de entrenamientos post-temporada supuso también el fin de la acción de la categoría este año, pero la bajada de esa bandera tuvo una implicación mucho más trascendente, ya que suponía el punto final de la etapa util del GP2/11. Tras siete años de leal servicio, el monoplaza más longevo de la historia de la categoría se apagó por última vez, para pasar a ocupar garajes y colecciones privadas. Sin ir más lejos, Prema ya ha vendido los suyos.

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Nacido en 2011 como la tercera generación de monoplaza diseñado por Dallara para la categoría desde la creación de la misma en 2005, el GP2/11 debería haber gozado del mismo periodo de homologación de tres años, pero la mala situación económica y deportiva en la que se encontraba la categoría al término de dicho periodo hizo que fuese renovado por otros tres años. Con el inminente cambio de nombre a Fórmula 2 en 2017, el coche recibió un año extra de vida para dar tiempo a Dallara a crear el F2 2018, pero ya no habrá más prórrogas para un coche venerable que, ante todo, cumplió sus propósitos.

Desde su debut oficial el 11 de febrero de 2011, en la primera cita de la última temporada de la GP2 Asia Series, hasta la carrera sprint del pasado 26 de noviembre, disputadas ambas en Yas Marina, se han disputado 157 carreras con el GP2/11 como único e indiscutible protagonista, y en una gran cantidad de ellas, se ha podido apreciar que los objetivos de mejorar las carreras que deparó el GP2/08 y ofrecer una mayor competitividad se consiguieron plasmar en la pista, en mayor o menor medida. 16 pilotos se pusieron al volante antes de pilotar en un Gran Premio de Fórmula 1, pero no todos los campeones lo lograron, y las promesas de éxitos no han sido tan prolíficas con todos ellos. Así les ha ido a los siete campeones del GP2/11.

ROMAIN GROSJEAN (2011)

Tras un posible subcampeonato que se fue al traste con la llamada de Renault en 2009, y un 2010 que empezó en GTs y terminó renaciendo en los monoplazas al regresar a la GP2 y ganar la AutoGP, Romain Grosjean logró resarcirse en 2011 y hacerse con una vitola de campeón que estuvo precedida de la obtención de su segundo título en la GP2 Asia Series. Aunque no fue el primer ganador con el coche (Jules Bianchi le batió en Abu Dhabi), si fue el primer vencedor en la GP2 propiamente dicha, sumando en el Istanbul Park la primera de sus cinco victorias, llegando a encadenar seis podios seguidos y ganando el certamen con una ronda de antelación y 35 puntos de ventaja sobre Luca Filippi.

Desde entonces, el francés ha logrado permanecer en la Fórmula 1, donde sus resultados han ido de más a menos junto con la calidad de sus coches: con Lotus, fue octavo en 2012, sumando tres podios y una suspensión de una carrera por causar el famoso accidente múltiple en la salida del Gran Premio de Bélgica que afectó a Fernando Alonso, y séptimo en 2013, con seis cajones y rozando la victoria de forma seria hasta en dos ocasiones, pero las cosas se empezaron a torcer en 2014, año en el que solo puntuó dos veces. 2015 fue más apañado, puntuando en la mitad de carreras y con un inesperado podio en Bélgica.

Grosjean se las prometía felices con la compra de Renault, pero las intenciones de la marca y una oportunidad proveniente del otro charco fueron demasiado tentadoras. Así, el francés recaló en Haas, donde causó sensación al terminar sexto y quinto en las dos primeras carreras del equipo, y concluyó el año en decimotercer lugar, con un rendimiento que espoleó rumores acerca de un fichaje por Ferrari que nunca se produjo. En este 2017, el rendimiento ha sido más regular, y se ha puntuado con más frecuencia, pero los constantes problemas de frenos y el percibido exceso de quejas del francés por radio han enrarecido el ambiente en el equipo americano. Con todo, Grosjean seguirá un año más, siendo ya uno de los veteranos de la parrilla a sus 31 años, pero aún con mucho que demostrar.

DAVIDE VALSECCHI (2012)

El afable piloto italiano fue uno de los "campeones constantes" de la GP2, una etiqueta que suele jugar más en contra del piloto que a favor, como veremos en otros casos de la lista. Con Davide Valsecchi, las circunstancias fueron especialmente duras. Tras no haber hecho demasiado ruido en sus cuatro anteriores temporadas, ni en sus aventuras previas, su asociación con la DAMS que hizo campeona a Grosjean funcionó muy bien al principio, con tres victorias consecutivas en Bahréin. Pese a ello, el italiano pasó una dura sequía que complicó sus opciones ante su principal rival, otro "veterano" de cuatro años como el brasileño Luiz Razia. Eventualmente, una muy favorable penúltima ronda en Monza le permitió tener la suficiente ventaja para jugar sobre seguro y hacerse con el entorchado en Singapur.

No obstante, la poco convincente forma de ganar el título, así como unos rivales percibidos como "de menor nivel" (Razia, Esteban Gutiérrez, Max Chilton, Giedo van der Garde), y en un año en el que la Fórmula Renault 3.5 había 'pescado' a Jules Bianchi y Sam Bird, jugó en su contra. Así, el italiano no contó con ofertas de F1 y tuvo que conformarse con ser el tercer piloto de Lotus, pero, cuando el equipo necesitó a un sustituto para el lesionado Kimi Räikkönen en las dos últimas carreras del año, su falta de patrocinios y experiencia decantó la balanza hacia Heikki Kovalainen. Compuesto y sin asiento, Valsecchi dejó el equipo a final de año, no sin antes criticar duramente la decisión tomada. Tras este golpe, su carrera ha permanecido prácticamente estancada, aparte de esporádicas apariciones al volante de un Lamborghini en carreras de GT.

En 2014 planeaba competir en el International GT Open, pero no pudo disputar la primera ronda en Nürburgring al accidentarse en clasificación, y fue sustituido antes de la segunda. Dos años después, probaría fortuna de nuevo en la Sprint Cup de la Blancpain GT Series, yéndose de vacío tras medio campeonato. Pero, si en la pista no ha encontrado un hueco, fuera de ella sí lo ha conseguido con su labor como comentarista secundario de la F2 y la GP3 en Sky Sports F1, donde sus histriónicos comentarios durante las retransmisiones le han convertido en toda una celebridad, llegando a poner a prueba esas habilidades entrevistando a pilotos a pie de pista de forma algo menos afortunada, y en las finales de F1 Esports. Dentro o fuera de un cockpit, el bueno de Davide tiene cuerda para rato.

FABIO LEIMER (2013)

El otro gran campeón olvidado del GP2/11, a la historia del suizo no le faltan resortes de dramatismo en comparación con la de Valsecchi. El antaño campeón del difunto International Formula Master, y ex probador de Sauber, iniciaba en 2013 su cuarto año en GP2, con una progresión lenta, pero constante. Enrolado en las filas de Racing Engineering, Fabio Leimer, a priori en un segundo escalón de contendientes, terminó llevándose el gato al agua gracias a la irregularidad de los favoritos a prori, Sam Bird y James Calado, además de las terribles pájaras que hundieron a los destacados de la primera mitad de temporada, Stefano Coletti (sin puntos en las últimas 11 carreras) y, en menor medida, Felipe Nasr.

La Fórmula 1, sin embargo, no tenía las puertas abiertas para él, y el piloto suizo buscó acomodo en la resistencia, donde disputó la temporada 2014 del Mundial de Resistencia en un LMP1-L de Rebellion, abandonando en las cuatro primeras carreras y con un sexto puesto como mejor resultado. Al año siguiente, surgió la oportunidad de relanzar su carrera en la Super Formula con Mugen, pero el equipo rompió el contrato antes de empezar la temporada alegando problemas financieros del piloto. Sus esperanzas de triunfar en Japón duraron menos de un mes.

Leimer regresó a los circuitos ese verano, completando los entrenamientos libres del Gran Premio de Hungría con Manor y el doble ePrix de Londres que ponía punto y final a la primera temporada de la Formula E, con un 14º puesto en la primera carrera. Desde entonces, el suizo ha tenido que reenfocar su carrera en la Ferrari Challenge Europe, una competición monomarca de GTs de menor nivel. Allí, ha recuperado sus mejores sensaciones, al ser quinto el año pasado y sexto en 2017 con una victoria en cada temporada, además de imponerse este año en la Finale Mondiali de Mugello. La Blancpain GT Series podría ser el próximo destino de un piloto que, hoy día, califica la Fórmula 2 como "una pérdida de tiempo". Pocos se atreverán a llevarle la contraria en su caso.

JOLYON PALMER (2014)

La trilogía de campeones experimentados de la GP2 llega a su fin con el único que, además, contaba con los medios para consumar su salto a Fórmula 1. Pese a llegar con la vitola de subcampeón de la Fórmula 2 (competición paralela a la GP2 entre 2009 y 2012 con parrillas de mucha peor calidad), Jolyon Palmer no fue un contendiente al título hasta el cuarto, siguiendo una progresión muy similar a la de Leimer. Exhibiendo mucha más regularidad que sus predecesores, el británico hizo valer un fuerte comienzo y sus cuatro victorias para contener la amenaza del vibrante novato Stoffel Vandoorne con algunas carreras de margen.

Tras un año en las sombras, pilotando en 13 entrenamientos libres, la llegada de Renault a los mandos del equipo no le arrebató las llaves del segundo asiento que Lotus le otorgó, pero su paso por el equipo francés ha estado lejos de ser placentero. En su primer año, el piloto británico solo consiguió sumar un punto en el Gran Premio de Malasia, al volante, eso sí, de un coche muy poco competitivo con el que Kevin Magnussen solo puntuó en dos carreras. 2017 traería una máquina mucho más competitiva por parte de la marca francesa, y a un compañero mucho más duro, Nico Hülkenberg, y ahí fue donde las carencias de Palmer quedaron expuestas.

No sumar puntos en las primeras 13 carreras, mientras Hülkenberg acumulaba 34, fue la gota que colmó el vaso para una Renault que optó por precipitar la incorporación de Carlos Sainz que el megaacuerdo con Honda y Red Bull había propiciado. Un inesperado sexto puesto del británico en Singapur alargó la agonía un par de carreras más, pero finalmente Palmer tuvo que ver las últimas cuatro carreras como espectador. Toda vez que sus intentos de colarse en la terna de Williams para escoger al sustituto de Felipe Massa resultaron en vano, la aventura del hijo de Jonathan Palmer en la máxima categoría parece haber llegado a su final, y sin un próximo destino claro en el horizonte, para el cual Renault se ha comprometido a ayudar. ¿IndyCar con Carlin? ¿Formula E?

STOFFEL VANDOORNE (2015)

Su imponente conquista del campeonato en 2015 supuso un necesario golpe de aire fresco para una categoría que, a su vez, empezaba ya a vencer en la guerra con la Formula Renault 3.5, categoría en la que el belga fue subcampeón dos años atrás. Decidido a no completar un triplete de segundos, Stoffel Vandoorneno dejó títere con cabeza, ganando siete de las once carreras principales disputadas, y quedándose fuera del podio solo en cinco. Se quedó cerca de duplicar en puntos a un Alexander Rossi que fue subcampeón con una temporada más que competente, y de triplicar a Sergey Sirotkin, el tercer clasificado. Todo pintaba bien para la joya de la corona de McLaren... pero no era aún el momento oportuno.

La continuidad de Jenson Button en el segundo coche dejaba a Vandoorne sin más opción que ser tester, pero el equipo británico se movió con celeridad y, gracias a Honda, le encontró acomodo en la Super Formula, el veloz certamen de monoplazas de Japón. Pese a ser un novato en una dura parrilla, el belga se adaptó con rapidez, subiendo al podio en la primera carrera y ganando dos más. La segunda llegó en la ronda final, en Suzuka, pero una mala qualy y un accidente en la primera carrera le costaron sus opciones de título, terminando el año en cuarto lugar a seis puntos del campeón Hiroaki Ishiura.

Su exitoso debut en Bahréin 2016 en sustitución del lesionado Fernando Alonso fue el preludio perfecto para su promoción en 2017 en lugar de Button, y el belga ha cumplido en una primera temporada con varias sombras, pero con brillantes luces, como sus dos séptimos puestos consecutivos en Singapur y Malasia, superando en esta última prueba a Fernando Alonso con contundencia durante todo el fin de semana. En general, la mecánica no respetó a Vandoorne durante todo el año, y el empujón final del asturiano le dejó a 4 puntos, pero el piloto belga está dispuesto a consolidarse como una de las grandes promesas del futuro si el McLaren-Renault se lo permite en 2018.

PIERRE GASLY (2016)

El ascenso del piloto francés a la Fórmula 1 ha estado plagado de varios cambios de rumbo durante el mismo, y de posibles callejones sin salida, pero la continuada confianza de Red Bull permitió al piloto francés, campeón de la Formula Renault 2.0 y subcampeón de la 3.5 tras Carlos Sainz, brillar en 2016, su segunda temporada en la GP2 tras un primer año complicado en el que solo pudo ser octavo. Prema, una recién llegada, era su última esperanza, y a Pierre Gasly le tocó la lotería con uno de los equipos más dominantes de la historia de la categoría.

Tanto él como su compañero Antonio Giovinazzi protagonizaron una encarnizada pelea por el título en la que el italiano estuvo cerca de imponerse, pero en la que Gasly respondió en el momento apropiado al obtener en Yas Marina su cuarta victoria, imponiéndose por solo 8 puntos. El piloto francés, por desgracia, sufría del mismo problema que Vandoorne: sin opción de repetir en GP2, y sin hueco en F1. Red Bull optó por la misma solución y le mandó este año a la Super Formula. Pese a un desalentador inicio, el francés calentó motores con dos victorias y un segundo puesto, y se plantaba en la ronda final a medio punto del líder Hiroaki Ishiura, pero la irrupción del tifón Lan le impidió pelear por el título.

Unos meses antes, tuvo la oportunidad de debutar en Formula E en sustitución de Sébastien Buemi en Brooklyn y, a principios de octubre, Gasly efectuó su debut en Fórmula 1, en sustitución de un Daniil Kvyat caído en desgracia. El viaje a Japón para la abortada pelea por el título le impidió disputar la que habría sido su tercera carrera de F1 en Austin, pero el nativo de Rouen competiría también en las tres últimas. En una situación harto complicada, en plena guerra con Renault, con el equipo sufriendo numerosos problemas mecánicos y con otro compañero inexperto en la categoría como Brendon Hartley, Gasly consiguió terminar las cinco carreras, con un 12º puesto en Interlagos como mejor resultado. Confirmado ya en la parrilla de 2018, el francés tendrá la dura tarea de lidiar con los motores Honda y con un Hartley dispuesto a bregar con más dureza. Quelle cotidien.

CHARLES LECLERC (2017)

En una Fórmula 1 que aún se duele de la pérdida de Jules Bianchi hace dos años, la llegada de Charles Leclerc a la máxima categoría causa sensaciones encontradas. Las similitudes son poco obviables: su forma de llegar a la élite, su vinculación con Ferrari, el sorprendente parecido físico que guardan ambos, la relación personal entre quien era mentor y quien aún es alumno... Con todo, se podría considerar que el instinto ganador que Leclerc ha exhibido en su paso por las categorías inferiores es incluso aún más voraz que el de Bianchi, y eso son palabras mayores.

Su temporada de debut en la renombrada Fórmula 2, tras imponerse en GP3, no dejó lugar a dudas. Prema le dio las herramientas, y el monegasco las puso en funcionamiento: 7 victorias, 8 poles y una tremenda sensación de superioridad sobre el resto que solo el doble cero de Mónaco, la descalificación de Spa y los problemas en el Red Bull Ring y Monza impidieron reflejar con mayor brutalidad. Pese a ello, Leclerc terminó ganando el campeonato en Jerez con tres carreras de antelación, y se despidió del GP2/11 con una extraordinaria remontada en la carrera sprint de Yas Marina, culminando la temporada con una ventaja de 72 puntos sobre el subcampeón Artëm Markelov.

Muchas de las esperanzas de los tifossi para el futuro están depositadas en este joven talento de 20 años que, la próxima temporada, será piedra angular de la resurrección de Alfa Romeo en la Fórmula 1 merced al acuerdo de colaboración con Sauber, equipo que le dará la oportunidad de debutar en Fórmula 1 tras terminar por segundo año consecutivo en el fondo de la clasificación por equipos. Si es capaz de exprimir el Sauber de 2018 de forma tan excelsa como el GP2/11, el espectáculo estará garantizado.

Fotos: Fórmula 2