¿Qué es la reserva de dominio? ¿Qué debo hacer si mi coche la tiene?
Este término está presente en muchos ámbitos de la financiación de bienes y la adquisición de vehículos no escapa a ello. La reserva de dominio es un acuerdo pactado entre comprador y vendedor que viene incluido en los contratos de financiación a plazos y que, básicamente, estipula que la persona o entidad que vende el coche sigue siendo la propietaria del mismo mientras no se termine de pagar la deuda.
En este caso el comprador puede hacer uso del coche en cuestión, pero no tiene la autorización para venderlo, cambiarlo de titular o darlo de baja sin el consentimiento de la financiera, que generalmente no llega hasta que se ha terminado de pagar el vehículo.
Por ello, cuando se afronta la compra de un vehículo usado, es altamente recomendable pedir un informe en la Dirección General de Tráfico que indique si existen cargas administrativas pendientes o reserva de dominio. En caso afirmativo, hay que negociar la venta también con la financiera.
Cancelar la reserva de dominio
Siempre y cuando hayamos pagado íntegramente nuestro vehículo, liberarlo de la reserva de dominio es posible y relativamente sencillo, además de recomendable. Y es que, aunque hayamos terminado de pagar la financiación, la reserva no desaparece por sí sola y debemos tramitar su baja para poder actuar con libertad en el futuro:
- Solicitar una nota simple en el Registro de Bienes Inmuebles.
- Solicitar la carta de pago a la financiera.
- Solicitar el levantamiento de la reserva de dominio en el Registro de Bienes Inmuebles.
- Acudir a la Dirección General de Tráfico pasados 15 días para certificar que el vehículo está a nuestro nombre.
¿Puedo comprar o vender un coche con reserva de dominio?
No es posible. Si no has cancelado la reserva de dominio el coche no te pertenece y, por tanto, no puedes tramitar ningún tipo de transferencia de titularidad, pues la Dirección General de Tráfico denegará cualquier solicitud. Independientemente de si el coche ya ha sido pagado por un nuevo comprador, el titular del crédito y la financiera serán las únicas partes con capacidad para resolver el asunto. Igualmente, no podrás darlo de baja o regalarlo a otra persona, ya que, de nuevo, Tráfico denegará cualquier trámite que necesite de un cambio de titularidad.