A algunos conductores les aterra tanto el volante de su Volkswagen que han demandado a la marca
El volante de algunos Volkswagen incorpora botones táctiles para activar determinadas funciones relevantes para la conducción. Esto ha generado inquietud entre sus propietarios, ya que se activan involuntariamente y pueden provocar accidentes.

Hace tiempo que Volkswagen tomó la sabia decisión de suprimir los botones táctiles del volante en sus futuros modelos. Pero esta medida no ha evitado que aquellos que compraron vehículos con este tipo de tecnología vieran reemplazado su volante por otro con botones físicos.
Son muchas las marcas que apostaron por englobar las funcionalidades más significativas en las pantallas multimedia de los coches, reduciendo así a la mínima expresión el diseño de los interiores y dotando a los mismos de una modernidad sin precedentes.
Acusan a la marca de fraude de derecho consuetudinario por omisión, además de violación de garantía expresa e implícita y enriquecimiento injusto
El problema es que esto, además de ser incómodo a la hora de conducir y, por ejemplo, ajustar la climatización, planteaba problemas de seguridad al demandar mucha más atención del conductor que con un simple mando o botón físico.
El colmo de este tipo de apuesta fue la inclusión de los intermitentes en el volante por parte de Tesla o, en el caso de Volkswagen, que todos los botones del mismo fueran táctiles. Decisión ambas marcas se vieron obligadas a revertir, pero que a la firma germana le puede costar aún más disgustos
Demandas de los clientes
En Estados Unidos, un grupo de propietarios de Volkswagen ID.4 equipados con botones táctiles ha presentado una demanda colectiva dirigida a la empresa alemana. En la misma, se afirma que esta tecnología no solamente es molesta para el conductor, sino que también plantea problemas de seguridad, ya que es habitual que algunas funciones se activen de forma involuntaria durante la conducción.
Incluso, dos demandantes afirman estar «aterrorizados», lo que les hace «dudar» al conducir sus vehículos. Estos y el resto de afectados señalan que los controles son demasiado sensibles, lo que propicia que el control de crucero adaptativo se active con un «mero roce ligero de la mano», lo que potencialmente pone a los conductores en situaciones peligrosas.

El Volkswagen ID.4, principal afectado
El principal modelo que está siendo objeto de las críticas, así como el protagonista de la demanda, es el Volkswagen ID.4 eléctrico. Sus propietarios también alegan que la marca no ha revelado el supuesto defecto ni tampoco ha ofrecido una solución en forma de reparaciones o reemplazos adecuados. Tampoco una compensación económica.
De igual modo, alegan que Volkswagen conocía el problema debido a quejas de los clientes, registros internos e información enviada por los distribuidores, acusando a la marca de fraude de derecho consuetudinario por omisión, además de violación de garantía expresa e implícita y enriquecimiento injusto.
Ahora será el tribunal federal de Nueva Jersey quien deba estudiar una demanda en la que también se afirma que la Volkswagen ha violado las leyes de protección al consumidor en Connecticut y Massachusetts.
Fuente: Carscoops.com