Skoda lo tiene claro con el Fabia, Kamiq y compañía, pero no con el eléctrico más esperado de 2027
Skoda tiene grandes planes por delante, tanto para la gama de combustión como con los eléctricos. El fabricante checo trabaja en una gama paralela de cero emisiones, y ya ha admitido que el Vision O es un adelanto del futuro Octavia, y del que Klaus Zellmer ha revelado interesantes detalles... y problemas.

Skoda es una de las marcas que decidió apostar la mitad de sus cartas a los coches de combustión y la otra mitad a los eléctricos. Los checos saben que todavía no es el momento de enfrentarse a la reestructuración total de la gama, pero en la que están obligados a trabajar de cara al futuro.
El último en sumarse al catálogo ha sido el Elroq, ahora ya disponible con tracción total, una de las grandes diferencias comparado con el ID.3 y otros eléctricos de la competencia más directa. En una interesante entrevista, el jefe de Skoda ha desvelado gran parte de los planes de futuro de la firma checa, confirmando que el Fabia y el Kamiq recibirán una inyección de moral para aguantar hasta 2030.

El diseño es clave para Skoda, como sus modelos más pequeños
El Fabia ya lo hemos visto en plenas pruebas, pero lo más interesante es que, según Zellmer, ambos modelos estrenarán novedades en apenas unos meses: antes de finales de 2025, y el Scala también. Refiriéndose al más pequeño, el CEO de la marca checa ha señalado que «No se puede simplemente prolongar su vida útil y dar por sentado que nadie notará su edad. Tienen una buena relación calidad-precio y son una parte esencial de nuestra gama».
Zellmer considera el diseño un activo clave para Skoda, viviendo unos tiempos dulces gracias al moderno estilo «Tech Deck». El alto cargo reconoce que sus estilistas han demostrado saber combinar detalles de alta tecnología, como las parrillas iluminadas, pero sin «florituras futuristas».
Pero al trío este, que les habría gustado deshacerse, se sumará en 2026 el coche eléctrico más pequeño del fabricante. El Skoda Epiq será el eléctrico más barato del fabricante, en parte porque podrá equipar una batería de ferrofosfato de litio (LFP) con una capacidad neta usable de 38 kWh.

El Epiq será barato, pero de ahí a un éxito se antoja complicado
Este ha señalado que «Con la entrada en vigor de la norma de emisiones Euro 7 en 2027, la intención era eliminar gradualmente el Fabia, Kamiq y Scala. Se suponía que el próximo Skoda Epiq sería la alternativa. Nuestra teoría era que todo el que quiera un coche compacto comprará el Epiq. Pero no funciona así».
De hecho, recela de que sea un éxito, ya que la batería representa, actualmente, el 40 % del coste total de un eléctrico, y cada vez más difícil resulta mantener los márgenes de beneficio.
El gran problema de Skoda será el Octavia eléctrico en 2027
Zellmer no ha visto problema en el SUV eléctrico de siete plazas que se estrenará en 2026, y que se pondrá a la altura del Kodiaq, pero sí en la materialización del Vision O que se presentará en unos días. El jefe de Skoda no las tiene todas consigo, al señalar que «Veremos qué sucede con el Octavia como coche eléctrico de batería».
El dirigente, que no ha determinado si el Octavia se transformará por completo en un coche eléctrico o no, ha explicado que «La eficiencia tiene un límite; Tesla lo consigue mejor, con tres modelos operando en grandes volúmenes. Pero eso no funciona para los fabricantes tradicionales. No podemos permitirnos mantener modelos en el mercado que se solapan demasiado». Quizá el que peligre de verdad sea el Octavia Combi...
