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Qué es la cavitación, cómo puede producirse en los coches y qué problemas genera

En los vehículos, la cavitación puede ser un problema en varios sistemas que utilizan líquidos o fluidos para su funcionamiento, como el sistema de refrigeración del motor, el sistema hidráulico y los neumáticos.

Qué es la cavitación, cómo puede producirse en los coches y qué problemas genera
La cavitación puede afectar a algunos fluidos del motor de un vehículo. Imagen: Freepik

8 min. lectura

Publicado: 21/04/2023 16:45

Actualizado: 21/03/2024 11:18

En este artículo, exploraremos en detalle qué es la cavitación, cómo se produce y cuáles son sus efectos en los diferentes sistemas de los vehículos.

También analizaremos las medidas preventivas que se pueden tomar para evitar la cavitación y mantener los sistemas del vehículo en buen estado de funcionamiento.

Qué es la cavitación

La cavitación es la formación y colapso de burbujas de vapor en un líquido, debido a cambios en la presión y la temperatura.

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Estas burbujas pueden formarse cuando la presión se reduce lo suficiente para que el punto de ebullición del líquido disminuya por debajo de la temperatura ambiente.

A nivel de ingeniería, la cavitación puede ser problemática ya que puede causar daño en las superficies de las máquinas y disminuir su eficiencia. Por ejemplo, en las bombas centrífugas, la cavitación puede causar vibraciones y ruido, lo que a su vez puede llevar a fallos prematuros en el equipo.

Sin embargo, también se puede utilizar la cavitación de manera controlada en aplicaciones como la limpieza de superficies y la emulsificación de líquidos.

En la limpieza, las burbujas de cavitación pueden ayudar a eliminar la suciedad y los contaminantes de las superficies. En la emulsificación, las burbujas pueden dispersar un líquido en otro líquido para crear una mezcla homogénea.

La cavitación en los vehículos y qué problemas genera

Diferentes elementos de un automóvil pueden sufrir cavitación. Por ejemplo, la cavitación se puede presentar en el sistema de refrigeración del motor, que utiliza un líquido refrigerante anticongelante.

Este líquido tiene el objetivo de absorber y disipar el calor generado por la combustión en el motor (y también evitar la congelación en invierno). El líquido de refrigeración circula por el motor y por un radiador, donde se disipa el calor.

La cavitación, o formación de burbujas, puede dañar el sistema de refrigeración o hidráulico de un automóvil. Imagen: Freepik

Si hay un punto en el sistema de refrigeración en el que la presión cae lo suficiente, como en la bomba de agua o en la culata del motor, se puede producir cavitación en el líquido de refrigeración.

En ese caso, las burbujas de vapor formadas pueden provocar la obstrucción de los conductos y reducir el flujo de líquido de refrigeración, lo que puede llevar a un sobrecalentamiento del motor y daños en el mismo.

La cavitación también puede ser un problema en el sistema hidráulico de un automóvil. El sistema hidráulico es un conjunto de componentes que utiliza líquido para transmitir la energía de un lugar a otro dentro del vehículo. Este se utiliza en la dirección asistida, los frenos, la suspensión y otros componentes.

La cavitación en el sistema hidráulico puede ocurrir cuando la bomba hidráulica succiona aire junto con el líquido, debido a fugas en los sellos o juntas de los componentes, o por niveles bajos de líquido hidráulico.

La presencia de aire en el líquido hidráulico puede provocar la formación de burbujas, lo que puede reducir la capacidad del sistema hidráulico para transmitir energía y provocar ruidos y vibraciones.

La cavitación también puede llegar a darse en los neumáticos de los vehículos, aunque en este caso se trata de un fenómeno diferente al que ocurre en los sistemas de fluidos y también es más difícil que ocurra.

En los neumáticos, la cavitación se refiere a la formación de burbujas de aire dentro del caucho de la banda de rodadura del neumático. Estas burbujas se forman debido a la deformación del caucho cuando el neumático se desplaza sobre una superficie áspera o irregular, como una carretera en mal estado.

La cavitación en los neumáticos puede darse por exceso de fricción o sobrecalentamiento, y puede tener varios efectos negativos en la conducción, como la pérdida de tracción, la vibración y el ruido. Además, las burbujas de aire pueden debilitar el caucho de la banda de rodadura y reducir la vida útil del neumático.

Cómo evitar la cavitación en los coches

Para evitar la cavitación en el sistema de refrigeración del motor, es importante mantener el nivel de líquido de refrigeración adecuado y verificar el estado de las piezas del sistema, como la bomba de agua y el termostato, para asegurarse de que están funcionando correctamente.

También es importante utilizar el tipo de líquido de refrigeración recomendado por el fabricante del vehículo y cambiarlo regularmente según las recomendaciones del manual del propietario.

Un líquido refrigerante anticongelante en mal estado es susceptible de sufrir cavitación.

Para prevenir la cavitación en el sistema hidráulico del vehículo, es importante mantener el nivel de líquido hidráulico adecuado y asegurarse de que no haya fugas en el sistema.

Además, como en el caso anterior, es importante utilizar el tipo de líquido hidráulico recomendado por el fabricante del vehículo y realizar un mantenimiento adecuado.

Si se sospecha que hay aire en el sistema hidráulico, es necesario purgar el sistema para eliminarlo y restaurar el correcto funcionamiento del sistema.

Finalmente, para reducir la cavitación en los neumáticos es importante asegurarse de que los neumáticos estén inflados a la presión adecuada, según las especificaciones del fabricante del vehículo.

También es importante mantener los neumáticos en buen estado y reemplazarlos si presentan signos de desgaste o daño. Además, evitar conducir a altas velocidades sobre superficies irregulares puede ayudar a reducir la cavitación en los neumáticos.

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