
De calor veraniego a frío polar, no olvides comprobar esto en tu coche antes del fin de semana
Tras un septiembre abrasador con más de 36 °C en algunas zonas, el otoño irrumpe en España con lluvias y...
Uno de los elementos en el que más énfasis debemos poner a la hora de mantenerlo en buen estado es el filtro de aceite, que se encarga de garantizar la correcta lubricación de todos los elementos móviles del motor de nuestro vehículo.
El filtro de aceite, por tanto, es un elemento vital para el buen funcionamiento de un motor y, sobre todo, para que este nos dure muchos años en buenas condiciones, evitando averías innecesarias o desgaste prematuro. Además, el coste de sustitución del filtro de aceite no es alto, por lo que merece la pena insistir en su buen estado.
Como ya hemos avanzado, el filtro de aceite cumple la función de proteger el lubricante de impurezas antes de iniciar el recorrido por el circuito de engrase del motor.
Esto es importante porque, a consecuencia del rozamiento de los elementos mecánicos del mismo, se desprenden virutas metálicas que, de permanecer en el lubricante, acabarían provocando un desgaste superior y una posterior avería. Esto es especialmente delicado en cojinetes, rodamientos y pistones.
Si además el filtro de aceite termina obstruyéndose por acción de las impurezas, ello puede acabar provocando el sobrecalentamiento y gripado del motor ante la imposibilidad de que este se lubrique adecuadamente. Por todo ello es importante sustituir el filtro cada vez que realizamos un cambio de aceite o cuando el programa de mantenimiento del fabricante lo indica.
Cuando está en buenas condiciones, el filtro de aceite retiene un 95% de partículas, pese a que su espesor es hasta seis veces inferior al de un cabello humano. De hecho, los filtros evitan residuos de espesores de entre 10 y 40 micras, mientras que un cabello humano tiene un espesor aproximado de 60.
Generalmente, los filtros de aceite se fabrican con papel de celulosa, algodón y materiales sintéticos. Para evitar que el flujo de aceite deforme el papel, este se coloca sobre una estructura metálica, que a su vez se encaja en un soporte que forma parte del circuito de lubricación.
En función del tipo de coche que tengamos, el filtro de aceite deberá de ser de un tamaño u otro, y podemos clasificarlos en función del tipo:
Los materiales utilizados en la elaboración de un filtro de aceite, así como el propio lubricante, hacen imposible realizar una limpieza del mismo para una posterior reutilización, por lo que la mejor opción es sustituirlo cuando lo indica el fabricante.
Generalmente, la sustitución se suele realizar cada 20.000 km, aunque lo ideal es hacerlo con cada cambio de aceite, independientemente de los kilómetros recorridos.
El precio, como siempre ocurre en estos casos, depende del filtro de aceite elegido para su montaje, pero también del tipo de motor. Lo habitual es que el filtro oscile entre 5 y 15 euros, a lo que habrá que sumar el propio aceite y la mano de obra, que suele rondar en total unos 90 euros.
Se trata de una operación sencilla que podemos realizar nosotros mismos a poco que tengamos unos conocimientos básicos de mecánica. Para ello, debemos seguir los siguientes pasos:
Tras un septiembre abrasador con más de 36 °C en algunas zonas, el otoño irrumpe en España con lluvias y...
Donde esté Volkswagen, siempre estará Hyundai, que se ha visto obligada a dar un giro a su estrategia después de...
Son rivales por naturaleza y.aunque la industria del automóvil está plagada de sorpresas, los de la estrella se han visto...
Stellantis es una de las marcas que ha explotado el globo del downsizing hasta explotarle en la misma cara. Son...
Toyota ha decidido seguir la misma línea de los fabricantes alemanes, que cuidan enormemente a los propietarios de coches clásicos....