El lujo no tiene límites, Bugatti confirma récord de ventas y el tiempo que esperarás por sus coches
Luego dicen que hay crisis.... En el mundo en el que se mueve Bugatti está claro que no la hay, y así se ha encargado de hacerlo constar la marca francesa en una cita tan exclusiva como la Semana del Automóvil de Monterey. Justamente lo que le encantaría decir a todas las marcas normales, no exentas de problemas continuamente.

La escala de riqueza es casi interminable, repleta de escalones y con ciertas estrecheces que van desapareciendo conforme se escala más alto. Hace poco nos enterábamos que modelos tan exclusivos como el Audi RS 6 estaba teniendo uno de los mejores años en sus seis años de historia. La marca de los cuatro aros nunca antes había asistido a tan magno deseo, y estaba gratamente sorprendida por los niveles que estaba alcanzando.
Pero mucho más arriba tampoco hay problemas, y así lo ha señalado un tal Frank Heyl. No es un cualquiera, pero sí un gran desconocido porque es el diseñador de Bugatti, una fuente más que autorizada para hablar de ciertas materias que, en otras marcas, son secreto absoluto pero en el caso de la de Molsheim está claro que no es un tema tabú.

Bugatti, al límite de su capacidad de producción
Heyl ha estado presente en una de las citas más importantes para ricos, en la Semana del Automóvil de Monterey, un evento que se celebra en California y donde existen grandes posibilidades de atraer a su poderoso público hacia una marca de renombre como la francesa. Dicho de otra forma, donde encontrar clientes, especialmente nuevos, y donde Heyl ha dejado claro que «las cosas le van más que bien a Bugatti».
La palabra concreta ha sido demasiado. Lo que desearía decir todo jefe de las principales marcas europeas, que tienen que lidiar con la norma de emisiones Euro 7 o con los políticos que quieren cargarse la combustión. Las declaraciones que le habría gustado hacer al gran jefe de Mercedes, que ahora más que nunca siente la mala decisión de apostar solo (o mayormente) por coches eléctricos.
Bugatti no entiende de crisis, cinco años de espera
Heyl ha confirmado que esta buena situación es consecuencia de tener vendida toda la producción del Bolide, del que solo tienen que dedicarse a producir los ejemplares y entregarlos a sus dueños, como también las 250 unidades del Tourbillon disponibles para este año. El dulce momento en el que vive Bugatti llega hasta contar con 60 interesados en el nuevo hypercar, pendientes de alguna cancelación para que se les asigne, cosa que no suele pasar.
Por cierto, que los rumores apuntan a que el dueño del único Brouillard que se fabricará ha desembolsado nada menos que 17 millones de euros por él... Fíjate si el viento sopla tan a favor de Bugatti, que ha confirmado que no pueden fabricar un coche hasta 2029, y que todo está agotado. Es decir, que lo que se encargue ahora, llegará a las manos de su dueño prácticamente en 2030, en casi cinco años. ¿Demasiado tiempo?
