Qué es un scooter, qué carnet hace falta para conducirlo y qué relación tiene con los patinetes eléctricos
Los scooters, abarcando tanto modelos de combustión como eléctricos, constituyen una categoría diversa de vehículos que ha experimentado un crecimiento significativo en la preferencia de los usuarios. Te contamos qué son exactamente y en qué se diferencian de las motos.
Estos compactos y ágiles dispositivos ofrecen una solución versátil para desplazamientos urbanos, destacando por su eficiencia y facilidad de uso.
Ya sea impulsados por motores de combustión o propulsados eléctricamente, las scooters siguen siendo una elección común para aquellos que buscan una alternativa ágil y económica en entornos urbanos.
¿Qué se considera un scooter?
Según la Real Academia Española (RAE), un scooter o escúter es una «motocicleta ligera», aunque es más preciso definirlo como un ciclomotor o motocicleta de ruedas pequeñas con una plataforma para apoyar los pies.
Los scooters suelen tener motores pequeños con transmisión automática, por lo que resultan fáciles de conducir y económicos de comprar y mantener. Su entorno ideal es la ciudad, aunque muchos permiten realizar trayectos interurbanos con facilidad.
¿Cuál es la diferencia entre un scooter y una moto?
La principal diferencia entre un scooter y una motocicleta es su diseño. Los scooters tienen una estructura de cuadro abierto, con un asiento y una plataforma para los pies en la que el conductor se apoya.
Las motos, por su parte, tienen un cuadro cerrado, con el asiento y el motor montados sobre el bastidor.
Otras diferencias entre scooters y motos incluyen:
Motor: los scooters suelen tener motores pequeños y automáticos, mientras que las motos pueden tener motores de cualquier tamaño, desde pequeños y económicos hasta grandes y potentes.
Velocidad: los scooters suelen tener velocidades máximas más bajas que las motos.
Maniobrabilidad: los scooters suelen ser más maniobrables que las motos, lo que los hace más fáciles de conducir en el tráfico urbano.
Confort: los scooters suelen ser más cómodos de conducir que las motos, ya que el conductor está sentado en una posición más erguida y el asiento suele ser más amplio.
En general, los scooters son una buena opción para los conductores que buscan un vehículo cómodo, seguro y económico para desplazarse por la ciudad. Las motos son una buena opción para los conductores que buscan un vehículo más potente y versátil.
¿Qué carnet se necesita para conducir una scooter?
El permiso de conducir A1 es necesario para manejar scooters de hasta 125 cc de potencia. Además, aquellos con el permiso de conducir B para automóviles también pueden conducir ciclomotores con motores de hasta 125 cc.
Para obtener el carnet A1, los aspirantes deben tener al menos 16 años, pasar un test psicotécnico, aprobar exámenes teóricos comunes y específicos, y realizar un examen práctico de tráfico.
Los titulares del permiso A1 pueden conducir motocicletas sin sidecar de dos y tres ruedas, con cilindradas máximas limitadas a 125 cc, potencia máxima de 11 kW (para dos ruedas) y 15 kW (para tres ruedas). Al obtener el carné A1, se convalida automáticamente el carné AM, que permite conducir ciclomotores.
Cuál es la multa por conducir un scooter sin carnet
Conducir una moto de 125 sin el carnet A1 puede acarrear sanciones graves. Aunque los conductores con carnet B pueden manejar estos vehículos, conducir sin el permiso adecuado puede resultar en multas de hasta 500 euros y la retirada de cuatro puntos. El propietario del vehículo también puede ser sancionado.
Incluso, conducir sin ningún tipo de carnet puede llevar a penas de prisión de tres a seis meses, acompañadas de sanciones económicas y trabajos comunitarios. Además, la falta de permiso anula la indemnización del seguro en caso de accidente.
El scooter o patinete eléctrico
Aunque en España solemos asociar el término «scooter» al tipo de motocicleta o ciclomotor que ya hemos definido, un scooter también puede ser un patinete eléctrico.
Es decir, un Vehículo de Movilidad Personal (VMP) de dos ruedas autopropulsado por un motor eléctrico, con capacidad para una persona y con una velocidad máxima de 25 km/h.
El patinete eléctrico se ha vuelto muy popular en los últimos años, ya que permite realizar desplazamientos de varias decenas de kilómetros en entornos urbanos. Incluso, puede combinarse con el transporte público, ya que suele ser plegable y ligero.