DS Automobiles se ha propuesto hacerse un hueco en el competido mercado de los compactos premium. La popular marca francesa ha decidido rescatar del olvido un interesantísimo automóvil compacto. El DS 4 regresa a la vida y lo hace con el objetivo de enfrentarse a grandes adversarios. Un modelo totalmente nuevo que no guarda ninguna relación técnica con la generación anterior.
En el pasado, este modelo era conocido como Citroën DS 4. Sin embargo, y cuando DS se separó de Citroën para convertirse en una marca independiente, sufrió una importante actualización pasándose a llamar directamente DS 4. Ahora, este modelo regresa a los concesionarios habiendo sido renovado de arriba abajo. La segunda generación del DS 4 está lista para afrontar los nuevos tiempos que corren en Europa. Unos tiempos marcados por la electrificación, la conectividad y la automatización.
Para diferenciarse del resto de oferta en una categoría que ha estado dominada históricamente por modelos alemanes, el nuevo DS 4 saca a relucir la elegancia del diseño francés. Luce un frontal que derrocha personalidad. Especialmente por su enorme parrilla y grupos ópticos de los que emanan unas características luces LED empleadas para la conducción diurna. Además, y a diferencia de sus competidores, el DS 4 dispone de una versión denominada Cross con la que luce imagen «crossoverizada» para mimetizarse entre los SUV que circulan por nuestras carreteras.
Mide 4,40 metros de largo. Una longitud que lo sitúa en pleno segmento C. En su interior dispone de cinco plazas. Gracias a los 2,68 metros que alcanza la distancia entre ejes, las plazas traseras presentan un amplio y lujoso espacio. El maletero cubica un volumen de carga de 430 litros. Una cifra que se puede incrementar hasta los 1.240 litros en caso de abatir los respaldos de los asientos posteriores.
Como bien hemos señalado, el nuevo compacto de DS Automobiles debe enfrentarse a una lista de duros adversarios. Entre los principales rivales del nuevo DS 4 se
encuentran modelos como el Mercedes Clase A, el BMW Serie 1, el Audi A3 Sportback y el CUPRA León. Tampoco debemos perder de vista al Mazda3. Los desaparecidos Alfa Romeo Giulietta y Lexus CT también se enfrentarían al DS 4 en caso de seguir a la venta.
El nuevo DS 4 está disponible con motores de gasolina y diésel. También hay disponible una variante híbrida enchufable (PHEV). Las opciones de gasolina pasan por un motor 1.2 litros PureTech de 130 CV. En el apartado diésel hay un motor 1.5 BlueHDi de 130 CV. Ambos motores están asociados a una caja de cambios automática EAT8 de ocho velocidades y un sistema de tracción delantera.
La variante híbrida enchufable, denominada DS 4 E-Tense, desarrolla una potencia de 225 CV y también dispone de una configuración de tracción delantera. Su principal atractivo, más allá de la potencia, es su capacidad de circular en modo totalmente eléctrico. Dispone de una autonomía eléctrica de 62 kilómetros. Por lo tanto, luce el distintivo ambiental 0 Emisiones de la DGT (Dirección General de Tráfico) con todas las ventajas de movilidad que ello supone.
El DS 4 es fabricado en Alemania. Más concretamente el proceso de producción en serie tiene lugar en unas instalaciones de Stellantis localizadas en Rüsselsheim. En esta planta también se fabrica el Opel Astra. Y ambos coches están sustentados por la misma plataforma. La arquitectura modular EMP2.