
Por qué quitar la etiqueta ECO a los coches de GLP e híbridos es una mala idea (y su impacto en el mercado)
El Gobierno revisará el sistema de etiquetado medioambiental de la DGT. Habrá cambios en los distintivos disponibles y se abre...
El auge de los coches eléctricos ha popularizado un nuevo fenómeno realizado por algunos de los detractores de este tipo de movilidad. Sin embargo, además de ser incívico, puede acarrear una multa, ya que está prohibido.
El Icing, también conocido como ocupación indebida de puntos de recarga o bloqueo de plazas para vehículos eléctricos, es una práctica molesta que consiste en estacionar vehículos con motor de combustión interna (ICE) en plazas reservadas para la recarga de vehículos eléctricos.
Esta práctica, que está ganando presencia en países como España, obstaculiza el acceso de los conductores de vehículos eléctricos a los puntos de recarga, lo que puede ocasionarles importantes inconvenientes, como retrasos en sus viajes o la imposibilidad de completar la recarga de su batería.
Para combatir el Icing, las autoridades están tomando medidas en diferentes países. En España, por ejemplo, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha catalogado el Icing como infracción grave, por lo que se ha convertido en una práctica susceptible de ser multada.
Esta nueva normativa establece que estacionar un vehículo de combustión interna en una plaza reservada para la recarga de vehículos eléctricos puede ser sancionado con una multa de hasta 200 euros, aunque sin retirada de puntos en el carnet de conducir.
Además de las multas, la DGT también está trabajando en la instalación de cámaras de vigilancia en los puntos de recarga para identificar y sancionar a los infractores.
Según el artículo 105 de la Ley de Tráfico, la grúa municipal puede retirar y depositar el vehículo que incumpla la normativa ya mencionada. Sin embargo, es fundamental que el punto de recarga esté debidamente señalizado.
No en vano, la Ley de Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial establece requisitos para las plazas de estacionamiento destinadas a la recarga de coches eléctricos. Estas plazas deben estar señalizadas con la señal S17, que tiene que estar acompañada de una placa que especifique las limitaciones de uso, como el tiempo máximo de recarga.
Además, se pueden utilizar las señales R307 o R308 para prohibir el estacionamiento, excepto para vehículos eléctricos en proceso de carga, con un límite de tiempo definido.
Sí, un coche eléctrico o enchufable también puede ser multado, ya que la normativa no sólo se aplica a los vehículos convencionales que ocupen la plaza designada para la carga, sino también a los vehículos eléctricos que no estén utilizando el cargador o que hayan superado el límite de tiempo permitido.
Independientemente de las circunstancias y señalizaciones, está claro que la ley que debe imperar por encima de todo es la del sentido común y la solidaridad, ya que un usuario de vehículo eléctrico tiene tanto derecho a recargar y hacer un uso libre del mismo como el resto de conductores.
El Gobierno revisará el sistema de etiquetado medioambiental de la DGT. Habrá cambios en los distintivos disponibles y se abre...
La ciudad muchas veces parece la selva y eso también se aplica a la hora de encontrar aparcamiento. Pero cuidado,...
La DGT quiere renovar la asignación de distintivos medioambientales en España. Sin embargo, esta nueva etiqueta de color ojo nada...
Aunque apenas hayas oído hablar de esta problemática, es real y muy seria. Un reciente estudio alerta de las emisiones...
Cada semana, la DGT recuerda a los conductores que podrían multarles por mil y una infracciones cotidianas. Pero en la...